.
Según me contaron, el episodio fue el siguiente:
El hijo de una conocida, está estudiando música -contrabajo/bajo-, en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, en donde días atrás, este joven de 18 años, salía de una de sus clases de música y se dirigía a pie a su domicilio, cargando obviamente con su instrumento.
De más está decir que el «contrabajo» o bajo -como se lo conoce habitualmente-, cuenta con dimensiones importantes… o sea, no es todo lo portátil que el músico desearía fuera, a la hora de cargarlo. Más
Dicen que dijeron…