La cita…

Historia para armar

.

Se encontraron en el café de siempre, aquel lugar cómplice de tardes eternas, de miradas suaves, de silencios calmos. El lugar al que siempre acudían cuando debían decirse cosas importantes, al que habían apodado con humor  «El neutral»…

Había transcurrido el tiempo y volver a verse,  era el disparador de ansiedades contenidas. Era el momento exacto para canalizar todas las dudas, para dejar de suponer desamores… Tal vez, para recomenzar.

Javier necesitaba volver a llenar sus pupilas de Laura, y Laura moría por volver a oler, escuchar… mirar a Javier.

.

.

Ambos habían sido la dupla exacta para tolerar la vida codo a codo, corazón a corazón. Habían sido la pareja perfecta que idealizan los solitarios. Habían sido los amigos más completos que una unión podía brindar. Habían sido la locura plasmada en un amor.
En realidad habían sido todo eso y más, pero el peso de un mundo que comprende poco a ciertos enamorados, los plantó en geografías distintas… en familias diferentes y con nostalgias pesadas.

Pero, las revanchas llegan. Las distancias se acortan. Las voluntades mueven montañas… y el amor mueve al mundo.

Con puntualidad,  en el momento exacto, Javier, sentado en la misma mesa de hace veinte años, la vio entrar, portando su sonrisa inconfundible y su bondadosa mirada.

Luego de tantos años de esperas y lejanía se miraron y  solo pudieron decirse:

………………………………………………………………………

Mis queridos saltamontes, los invito a suponer que se pueden haber dicho estos dos  seres  en las circunstancias planteadas… o que habrían dicho o hecho ustedes, obviamente!!!
¡¡Que no les tiemble el pulso, e imaginen!!

.

Seru Giran – Desarma y Sangra

(Para escuchar)

.

Anuncio publicitario