¡¡¡CANTEEE!!!
Refrito
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En una oportunidad fui invitada a formar parte de un jurado para una selección de cantantes. El magno evento se desarrollaría en la sede de un club deportivo, lo cual me hizo dudar hasta de mis limitaciones para cumplir con dicho rol, pues, mi exigencia en algunas cuestiones, es muy firme: carezco de consideraciones y amabilidades.
El día indicado arribé puntual, con mi mente y oídos prestos. Al ingresar comprobé que el espacio era absolutamente inapropiado, de todos modos, no era yo quien fijaba las reglas de juego y me atreví a dar algunos consejos y proponer algunos cambios o alternativas, debido a la condiciones con las que se perfilaba el evento. Marqué algunas falencias acústicas…
No tuve cuorum. Más
Dicen que dijeron…