A contramano…

Un refrito, diciembre 2006.

Con la impresión de estar a contramano, miro la marea humana que transcurre a pesar mío. No encuentro respiro caminando por la calle. Los paseadores de perros pelean con señoras paseadoras de bolsas de shopings. La caca de todos los perros del universo salen de paseo en las suelas de los zapatos de los que me rodean, mientras van. Yo regreso, deseo llegar salva a mi bunker. Escapando, disimulo inexpresiva.

Todo se sucede año tras año, al igual que los días y las noches, como la vida y la muerte. Nadie intenta despertarse. Hay que obedecer, nadie escapa a su obligación de adquirir. Todos cumplen: compran, sonríen, obsequian augurios y creen ser felices comprando.
La razón se ha evaporado con el sol. Tal vez sea lluvia mañana.
La tarea de hoy: adquisición de felicidad instantánea. Sospecho que no se notará mi ausencia. Paladeo el gusto de no estar, me deleito un rato al escapar. Me engaño creyendo no pertenecer.
Imagino ver todo desde un satélite: hormigas con bolsas de regalos, moléculas con moños dorados. Justificados en creencias ajenas, se gasta lo que no se tiene en aparentar amor al prójimo y no hay preocupación alguna.
El estallido de pirotecnia me hace reaccionar, puteo. El olor a pólvora me lleva lejos, a lugares sin shopings ni etiquetas, pero con guerras.
Sigo mi camino. Ya falta poco para mi casa y mi vida, para una ducha y mi silencio. Para casi el final de otro día a fines de diciembre…

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Pearl Jam – Do the Evolution (Subtitulada)

 

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